Hoy, primer día del año, me he cruzado cara a cara en una calle semi-desierta con Federico Jiménez Losantos. Yo no sé si esto es buen augurio o qué.
Lo malo de ser borderline lupas es que sólo reconoces a las personas a un máximo de 10 metros de distancia, con lo que tienes muy poco tiempo para idear algo ingenioso que decir. Porque yo creo que a las celebridades hay que soltarles borderías o alabanzas y ellos tienen que encajarlas sin más. Es-el-precio-a-pagar-por-la-fama. Pero en esta ocasión no dije nada y apenas le agredí.
AGUR!
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4 comments:
¿Apenas?
Quedan bien claras cuales eran tus intenciones. Sólo te faltó tiempo.
Me alegra que seas de efectos retardados.
Contente.... hater contente...
un escupitajo, tal vez?
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