Thursday, June 21, 2007

Yo a lo mío

Pese a quien pese, sigo con mis ataques demoledores a todo lo argentino. Hoy me centro en la circulación trafical.

En Buenos Aires, muchos pasos de zebra o pasos de peatones son orientativos pero no vinculantes. Cruzar uno es en cierto modo como participar en un concurso de corte de vaquillas: acabas salvando el culo, pero normalmente de refilón.

Algo en lo que la colonia supera claramente a la metrópoli es la señalización de las calles. Yo imagino que lo hacen así de bien porque les sale a cuenta. Al ser más fácil si te pierdes aquí acabar en un sitio en que te acaben apuñalando, yo creo que les interesa rotular bien las cosas porque si no es mucho gasto en servicios de limpieza y acaban luego todos los suelos tirando a rojizo.

O como creen que acabó rosada la Casa Rosada?

AGUR!

3 comments:

Néstor Torre said...

Creo que te está sentando bien el cambio de aire, tu post es de lo mejor que he leido en este vertedero que antes era un blog..

¿Por qué será?

Anonymous said...

la casa rosada fue pintada por primera vez con cal + sangre (criolla -dice la leyenda), dando ese color rosado que aún mantiene (virando su valor cromático con el gobierno de turno)

arbusto el guerrero said...

Coincido con Saltimbanco en lo del cambio de aires. ¿Por qué será, digo yo también?