Lo ha visualizado todavía más con la cooperación de Quevedo, el mismo que, por cierto, difundió hace unos meses la supuesta cesión por parte de Zapatero de Ceuta y Melilla a Marruecos. El empate tenía que producirse pronto y se ha producido. Hay cosas con las no se juega impunemente. Quevedo parece especializado en disparar con fuego real a la cabeza del contrincante. Aprieta el gatillo dialéctico y punto. "Yo tengo la convicción moral –sentencia- de que los atentados del 11 de marzo de 2004 fueron el producto de una conspiración para echar al PP del poder. A quienes me preguntan (…) si creo a la izquierda española capaz de semejante barbaridad les contesto, sin dudarlo, que sí".
Enric Sopena, en ElPlural.com
Por eso vas a perder, Zapatero, hagas lo que hagas. Porque no sólo la dignidad, la memoria y la justicia están de parte de las víctimas: también lo está la alegría. Y ante esa alegría infinita nada puede tu poder político ni mediático, como tampoco podrá nada el odio miserable de tus nuevos compañeros de viaje. No te quepa ninguna duda: la victoria final es de las víctimas. Y con ellas, de la alegría.
BlackHole-boy, en LibertadDigital.com
Comentario tipo injusticias-de-la-vida: Tanto Sopena como BlackHole-boy se lo deben llevar crudo escribiendo cosas como las que escriben -- sin ningún atisbo de objetividad o ética periodística. Aunque me imagino que los muy sectarios son una minoría, siempre van a tener un núcleo duro de gente que va a aplaudir lo que hagan porque "son de los míos". Y eso les garantiza una existencia próspera.
Ah, el gran debate... El "hay que ser honesto" frente al "hay que medrar". Ni Toño podría resolverlo.
AGUR!
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