Apología contra el carnet de conducir

Por las características de mi trabajo, más de una vez me preguntaron si tenía intención de vivir en Estados Unidos. Siempre contesté con un gran "No f*cking way". Hay otras muchas razones más importantes, pero una no pequeña es que no tengo ganas de vivir en un país en el que eres medio minusválido si no conduces. Y yo no conduzco, ni pienso (conducir). No tengo carnet y si todo va sobre ruedas (qué ingenioso!) no lo tendré nunca.

Aparte de que tengo un sentido de la orientación malo y desconecto cuando me aburro (accidente seguro), hay varias razones por las que creo que conducir es m*erda:

- El coche es una cadena. A mi me gusta ir lo más ligero posible, de peso y de preocupaciones, y un coche inserta 17.000 nuevas cosas de las que estar pendiente en tu vida.
- Te exigen un montón de requisitos para conducir. Que si un carnet, que si no beber... Yo digo como Aznar: Quién es usted para decirme si puedo conducir o no? Ya sabré yo lo que hago o lo que no hago. No te j*de.
- No hay sensación más desagradable que subirte a un coche que ha estado cociéndose al sol un buen rato. Yikes.
- El transporte público en España mola. Pro-tren siempre. Te llevan, tienes mejores vistas, puedes mear y hasta comida puedes comprar. Nada supera al tren a la espera de que llegue la teletransportación o los tubos de Futurama.
- La circulación cocheril asfixia a las ciudades. Si por mi fuera, no iba a quedar una calle no peatonal. Mucho mejor para el comercio y para la vista, que hay mucho obeso por no caminar.

Evidentemente la independencia de movimientos que te proporciona un coche no la tienes sin coche. Pero j*der, meto los contras y el pro en un saco y lo tengo claro.

Digo!

AGUR!